En una esperada rueda de prensa, el funcionario advirtió que el coronavirus SARS-CoV-2 mantiene su progresión, a partir de la circulación de las cepas mutantes, que representan más del 60 por ciento de los contagios del país, aunque descartó que se trate de un alza exponencial de la pandemia.
De acuerdo con Castex, el escenario más complejo se manifiesta en 23 departamentos, tras añadir a la relación a Hautes-Alpes, Aisne y Aube, lista en la que ya estaban Alpes-Maritimes, Bouches-du-Rhone, Drome, Essonne, Moselle, Nord, Paris, Pas-de-Calais, Seine-Saint-Denis, Var e Yvelines, entre otros.
Los centros comerciales con más de 10 mil metros cuadrados serán cerrados en esos territorios, donde el uso de máscara continuará obligatorio en las áreas urbanas y recomendamos a las personas permanecer en casa, dijo.
El primer ministro solo decretó el confinamiento de la población el fin de semana en el norteño Pas-de-Calais, desde las 08:00 hora local del sábado hasta las 18:00 del domingo, medida aplicada días antes de forma más estricta, de viernes a lunes, en las ciudades de Dunquerque y Niza.
La visión del gobierno es evitar una nueva cuarentena general, similar a la aplicada en la primavera y el otoño del año pasado, pero Castex insistió en que eso ocurrirá si los franceses reducen los contactos sociales, sobre todo en los lugares con mayor circulación de la Covid-19.
Otra medida señalada es el aumento del ritmo de la vacunación contra el SARS-CoV-2, proceso que llegó hasta el momento a tres millones 200 mil adultos, más de la mitad de ellos con las dos dosis recibidas de los agentes inmunizantes.
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