La ministra francesa para la Transición Ecológica, Barbara Pompili, señaló en Glasgow, sede de la Conferencia de la ONU sobre el Cambio Climático COP26, que la firma por París del acuerdo constituye una decisión coherente con su compromiso medioambiental.
Según la funcionaria, su país es uno de los más ambiciosos en la lucha contra el cambio climático.
A propósito de la iniciativa respaldada ya por más de 20 naciones, Pompili subrayó durante la última jornada de la conferencia que el Acuerdo de París y el enfrentamiento a las desviaciones climáticas implican necesariamente pasar la página de las energías fósiles.
Francia fue duramente criticada por organizaciones ecologistas y defensoras de la naturaleza, tras no adherirse en un principio a la coalición que llama a no aportar financiamiento en el extranjero en este sector, sin garantizar la presencia de tecnologías de captura de carbono.
Por lo tanto, algunas ONG reaccionaron desde suelo galo considerando la decisión un triunfo de la presión de la sociedad civil, entre ellas Los Amigos de la Tierra Francia y Oxfam Francia.
Oxfam fue más allá y adelantó que “será muy vigilante” con el cumplimiento del compromiso asumido por el gobierno del presidente Emmanuel Macron.
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