En el Consejo Popular Pocito-Palmar, el mandatario llamó a “luchar duro”, participar, hacer y controlar las obras que se realizan allí como parte del programa nacional de recuperación de localidades con desventajas sociales, para resolver problemas acumulados y elevar el nivel de vida de sus habitantes.
Ese sitio, donde viven 116 núcleos familiares, es una de las 62 barriadas habaneras a las que se dirigen recursos para acciones prioritarias de mantenimiento, reparación, construcción y mejoramiento de viviendas y viales, así como servicios básicos.
A través de su perfil en Twitter, el jefe de Estado cubano ratificó hoy a este programa como una parte importante para la construcción del socialismo en el país caribeño.
Recordó, asimismo, que “la Revolución también empieza en el barrio”, por lo cual, dijo, perfeccionar las transformaciones es otra forma de trabajar con varios conceptos esenciales del sistema político, económico y social de la nación.
Con ese enfoque, Díaz-Canel recorrió la víspera comunidades de las orientales provincias cubanas de Guantánamo y Granma, donde constató la marcha de los trabajos que se realizan allí con el aporte de la población, las universidades y el Gobierno.
En la ocasión, destacó que ese trabajo en los barrios “llegó para quedarse», y orientó que hacerlo sistemático y sostenible.
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