De acuerdo con el organismo de la ONU, este incremento está impulsado por el alza del 17 por ciento de los precios de los productos, sobre todo minerales, hidrocarburos y agroindustriales, y por una expansión de ocho por ciento del volumen exportado.
El mayor dinamismo se registra en el comercio con China (35 por ciento) y dentro de la propia región (33), seguido por la Unión Europea (23) y Estados Unidos (19).
La Cepal considera importante este repunte, luego de la fuerte caída del 10 por ciento registrada en 2020, aunque advierte que la recuperación será asimétrica y muy heterogénea, en un contexto de gran incertidumbre por la crisis derivada de la pandemia de la Covid-19.
“Esta situación debe llamar a reflexión sobre la urgencia de profundizar la integración económica regional”, advirtió la secretaria ejecutiva de la Cepal, Alicia Bárcena.
Señaló Bárcena que avanzar hacia un mercado regional integrado es indispensable no solo para generar escalas eficientes de producción y promover procesos de diversificación productiva y exportadora, sino también para alcanzar una mayor autonomía en sectores estratégicos.
La entidad considera un desafío lograr la autonomía productiva regional en la industria de la salud, sobre todo en el sector farmacéutico y el de los dispositivos médicos.
En su informe “Perspectivas del Comercio Internacional de América Latina y el Caribe”, la Cepal estima que para 2022 el valor de las exportaciones e importaciones regionales de bienes aumentará 10 y 9 por ciento, respectivamente, en un contexto de menor crecimiento de la economía global.
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