En dicho estudio, los autores modelaron en 17 países los beneficios de promover esa modalidad y si el 100 por ciento de tales viajes sustituyen a aquellos realizados en autos.
Las políticas globales de uso de la bicicleta pueden proporcionar importantes beneficios de mortalidad en los próximos años, indicó el equipo, dirigido por la norteamericana universidad estatal de Colorado y en colaboración con científicos del Instituto de Salud Global de Barcelona, España.
Esta investigación constituye un llamado para aplicar políticas que apoyen la movilidad sostenible y un diseño urbano saludable, expresó su líder, el doctor David Rojas-Rueda, para quien “las políticas actuales repercutirán en la salud de las generaciones futuras”.
Los escenarios de alto uso de la bicicleta en 2050 se basaron en políticas que demostraron un rápido aumento de los niveles de uso de la bicicleta, como reacondicionar la infraestructura ciclista en las carreteras existentes para crear redes en las calles arteriales.
Además, incluyeron, las pequeñas calles residenciales y las carreteras interurbanas, la implantación de sistemas de bicicletas compartidas en las grandes ciudades o reformar las leyes y las prácticas de aplicación para proteger mejor el transporte activo.
El texto recomendó la inversión en instalaciones para caminar y transporte público para ofrecer viajes que puedan combinarse con la bicicleta y eliminar las políticas de apoyo al uso adicional de vehículos motorizados.
Mencionó el parqueo gratuito y las subvenciones al combustible, y establecer tarifas de congestión, de viaje y de impacto de desarrollo para cobrar un precio por conducir.
El equipo de investigación, que evaluó el impacto de las bicicletas mecánicas y eléctricas, se centró en la población adulta de Alemania, Brasil, Canadá, China, Dinamarca, Egipto, Estados Unidos, Francia, India, Indonesia, Italia, Japón, México, Países Bajos, Reino Unido y Rusia, entre otros.
jha/znc