James intenta interrogar al exmandatario bajo juramento como parte del proceso sobre sus actividades empresariales y según dos personas mencionadas por el rotativo este es un movimiento inusual que llega en una coyuntura crítica en una investigación criminal paralela sobre Trump. Según los informes como parte de la pesquisa que desarrolla el fiscal del distrito de Manhattan, Cyrus R. Vance Jr, la posible fecha del interrogatorio será el 7 de enero y si James encuentra pruebas de irregularidades, podría presentar una demanda contra el exmandatario (2017-2021), pero no podría presentar cargos penales.
Vance intenta demostrar en una dilatada investigación si el magnate neoyorquino o la Organización Trump incurrieron en un patrón de fraude criminal por presentar intencionalmente falsos valores de la propiedad a los prestamistas potenciales.
Ambas oficinas de los fiscales coinciden en sus pesquisas sobre el exnúmero uno del Gobierno estadounidense y según el Times este podría negarse a declarar una vez que James lo cite formalmente.
Aclaró el Times que los abogados del demandado podrían pedir a un juez que bloquee la declaración, argumentando que su testimonio podría ser utilizado injustamente en su contra en la investigación penal, violando su derecho constitucional contra la autoincriminación.
Incluso si un juez falla a favor de la demanda de James, Trump podría invocar su derecho a la Quinta Enmienda y negarse a responder a las preguntas, aseguró el diario.
«Esto no es parte de la investigación penal», dijo Danny Frost, un portavoz de Vance y se rehusó dar más detalles sobre si la oficina de James notificó a los fiscales de Vance sobre la solicitud de interrogar al exmandatario.
Los magistrados iniciaron la investigación civil sobre el entonces gobernante desde marzo de 2019, la cual se centra en algunos de los mismos hilos que la investigación criminal que está siendo supervisada por Vance, y ha incluido el escrutinio de propiedades similares, incluida la finca Seven Springs del Trump, en el condado de Westchester.
En la actualidad el expresidente y su equipo legal tratan de evitar que un Comité selecto del Congreso acceda a la documentación que guardan los Archivos Naciones sobre el asalto al Capitolio el 6 de enero y lo que se entiende como un esfuerzos para encubrir las acciones del exmandatario bajo el delgado manto de la impunidad ejecutiva.
El magnate neoyorquino prosigue con su desafío legal, maniobras que se alargaran hasta clarificarse si el privilegio ejecutivo ampara al exmandatario quien es parte de la investigación contra las personas que, diversos medios señalan, intentaron dar un golpe de Estado en el país.
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