Al intervenir en el 341 Consejo de Administración del órgano especializado de las Naciones Unidas, el embajador reiteró el repudio de la isla a la manipulación de los organismos multilaterales para intervenir en los asuntos internos de los Estados.
‘La OIT ha sido siempre un foro de soluciones y de consenso, de diálogo amplio e inclusivo. Por tanto, Cuba considera que en el caso de Venezuela no hay motivo para romper esa tradición’, subrayó.
Caracas respondió en el foro al informe de la Comisión de Encuestas, ente a cargo de las investigaciones, sobre alegados incumplimientos de convenios sobre salario mínimo, libertad sindical y consulta tripartita.
Quintanilla resaltó en el foro la voluntad del gobierno venezolano de continuar cumpliendo sus obligaciones y compromisos en el marco de la OIT, así como de implementar acciones en sintonía con las recomendaciones de la Comisión de Encuesta.
‘La petición de asistencia técnica, solicitada en 2020 y reiterada recientemente, es un ejemplo’, dijo el representante cubano, quien recordó el complejo escenario que enfrenta esa nación sudamericana por la guerra económica y las medidas coercitivas unilaterales que le imponen desde el exterior, en particular por Estados Unidos.
Cuba denunció que las acusaciones contra Venezuela conforman un caso claramente motivado por intereses políticos, en una organización en la que deben primar los intereses sociales.
Deseamos que se actúe privilegiando el diálogo tripartito y la asistencia técnica y no se permita el establecimiento de precedentes que politizarían, aún más, las decisiones de este órgano, afirmó.
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