El déficit en sí mismo no es un elemento inflacionario, pero la estructura del gasto que lo genera sí contribuye a este conflicto, explicó la ministra de Finanzas y Precios cubana, Meisi Bolaños, en el programa televisivo Mesa Redonda.
Resulta vital ser más racionales en sus niveles de conformación para lograr una sostenibilidad fiscal, avanzar en los procesos macroeconómicos y garantizar que el peso cubano sea el centro financiero de la nación, reconoció.
Para ello, son necesarias medidas integrales que contribuyan a una mayor actividad productiva y de servicios, crecimientos graduales, sostenibles y exponenciales de los ingresos y por supuesto, racionalidad en el gasto, enumeró Bolaños.
Incrementar la oferta de bienes y servicios no solo permitirá satisfacer las necesidades de la población y bajar precios, sino también tener más ingresos en el presupuesto del Estado, apuntó.
Además, influirá en una mejoría gradual en el crecimiento de los ingresos que “aportará soluciones al elevado déficit fiscal y a cuasi fiscalidades desde el presupuesto estatal”.
Por otro lado, hay que buscar la racionalidad necesaria del gasto. Reiteró que el país no renunciará a los programas sociales, a atender situaciones de vulnerabilidad y desigualdad, ni a servicios básicos de primera calidad como la salud, la educación y la cultura.
Pero estas prioridades “tiene un alto costo en un presupuesto eminentemente social, donde van disminuyendo las transferencias empresariales en busca de esa necesaria eficiencia”.
Por tanto, urge identificar soluciones conjuntas que disminuyan los indicadores de ineficiencias en la actividad productiva de las empresas y nos ayuden a disminuir los costos del gasto social.
También debe analizarse el alto gasto de salarios en la actividad presupuestada: “no significa renunciar a nuestros técnicos, especialistas, médicos, maestros; sino de buscar eficacia en ese gasto público ante la cantidad de personas empleadas en el sector”, dijo la ministra.
Desde su perspectiva, en este proceso resulta fundamental la búsqueda de mecanismos para que haya un presupuesto más participativo y una mejoría en todos esos indicadores.
Hay que seguir trabajando con mayor creatividad, ciencia e innovación, de modo que nuestra empresa estatal socialista avance en función del desarrollo del socialismo próspero y sostenible al que todos aspiramos, concluyó.
msm/att