En el más reciente informe de la isla sobre los daños que ocasiona este cerco económico, comercial y financiero, la cancillería explicó la vigencia de las leyes y regulaciones que sustentan esa política de asedio.
‘Las agencias estatales y gubernamentales estadounidenses, incluidos los Departamentos del Tesoro y el Comercio de ese país, aplican con estricto rigor las legislaciones del Congreso y disposiciones administrativas que establecen el bloqueo’, refiere el documento.
Durante la presentación de este reporte a la prensa, el canciller Bruno Rodríguez subrayó que el cerco contra la mayor de las Antillas se recrudeció durante la actual situación epidemiológica al impedir la compra de equipos y otros insumos para enfrentar la Covid-19.
La anterior administración estadounidense de Donald Trump renovó sanciones en virtud de la Ley de Comercio con el Enemigo de 1917, una legislación que solo se mantiene vigente para aplicarla a la isla.
Además, permanecen activas también contra Cuba la Ley de Asistencia Exterior (1961), la proclama presidencial 3447 (1962), las regulaciones para el Control de Activos Cubanos del Departamento del Tesoro (1963), las leyes Torricelli (1992) y Helms-Burton (1996), entre otras disposiciones.
De acuerdo con la cancillería, las normativas que amparan el bloqueo a Cuba constituyen un acto de guerra económica, destacan por su marcado carácter extraterritorial y violan el derecho internacional.
Según el informe, entre abril de 2019 y marzo de 2020, las medidas coercitivas de Estados Unidos por este concepto provocaron por primera vez en seis décadas pérdidas superiores a los cinco mil millones de dólares en un año.
Recientemente el Consejo de Derechos Humanos de la ONU aprobó una resolución sobre el impacto negativo de las medidas coercitivas unilaterales.
A través de su cuenta en Twitter, Rodríguez refirió que con el apoyo de Cuba, el organismo instó a todos los Estados a dejar de adoptar, mantener o implementar este tipo de sanciones.
‘Estas medidas son ilegales e inmorales. Con ellas se ha intentado rendir por hambre y necesidad a nuestro pueblo por más de 60 años’, agregó el ministro de Relaciones Exteriores.
La resolución contra las acciones unilaterales constituye un nuevo rechazo de la comunidad internacional, la misma que cada año desde 1992 vota en las Naciones Unidas a favor de poner fin al bloqueo contra Cuba, aunque Estados Unidos decida ignorarla.
Un tema que será abordado nuevamente hoy cuando la isla dialogue con la Unión Europea (UE) sobre la aplicación de sanciones como medio de ejercer presión política y económica contra otras naciones.
El foro virtual entre ambas partes analizará los ámbitos jurídico y práctico de la legislación existente en la UE para contrarrestar el carácter extraterritorial de leyes como la Helms-Burton, con la cual Estados Unidos refuerza su cerco a la isla y amenaza a intereses europeos.
Sobre este particular, Yusnier Romero, especialista de la dirección general de Estados Unidos de la cancillería cubana, comentó recientemente a Prensa Latina que países como México, Canadá y naciones europeas aprobaron un grupo de leyes denominadas antídotos para cubrirse ante el alcance de las legislaciones norteñas.
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