Es esa ausencia de codicia y de capitalismo lo que explica por qué en la Cuba socialista la tasa de muertes por Covid-19 es de 35 por un millón de habitantes, con poco más de 400 fallecidos desde que se reportó el primer caso de la pandemia en la isla caribeña un año atrás, aseguró a Prensa Latina la profesora de Economía e Historia Social de la Universidad de Glasgow, Escocia.
También resaltó que pese a estar sometido desde hace 60 años al bloqueo económico, comercial y financiero de Estados Unidos, el pequeño país antillano cuenta con cinco candidatos vacunales en diferentes fases de ensayos clínicos, y pronto se convertirá en una de las primeras naciones del mundo en inmunizar a toda su población contra el coronavirus SARS-CoV-2.
Según Yaffe, esos logros son suficiente para exponer la falacia de los supuestos comentarios hechos por el primer ministro de Reino Unido, Boris Johnson, quien según el tabloide The Sun aseguró el martes pasado a un grupo de legisladores conservadores que el éxito de la campaña de vacunación británica se debía al capitalismo y la codicia.
Los comentarios de Johnson se basan en el dogma de que la búsqueda de ganancias privadas a través de los mercados libres capitalistas lleva a un resultado eficiente, pero eso depende de la forma en que se mida la eficiencia, apuntó la especialista.
En opinión de Yaffe, la pandemia actual demostró de forma clara que las necesidades de salud pública no pueden satisfacerse de forma adecuada e igualitaria bajo un sistema basado en la ganancia.
Bajo esa lógica de Johnson, entonces habría que admitir que la codicia y el capitalismo también son responsables de que Reino Unido sea el quinto país del mundo con más fallecidos a causa de la Covid-19, con casi mil 885,93 por millón de habitantes, aseveró.
De acuerdo con la académica, el éxito del programa de vacunación británica, con más de 28,6 millones de personas inmunizadas con la primera dosis de las vacunas de AstraZeneca/Oxford o Pfizer/BioNTech en apenas 100 días, se debe en primer lugar a los miles de millones de libras esterlinas procedentes de los fondos públicos que se invirtieron en la investigación y desarrollo de los preparados y en el servicio nacional de salud.
Recordó, además, que el Gobierno conservador liderado por Johnson se negó a tomar medidas necesarias para frenar la transmisión del virus a nivel de las comunidades y fracasó a la hora de proveer a los trabajadores sociales y de la salud con los equipos de protección adecuados, lo que en ambos casos redundó en una gran cantidad de muertes evitables. mgt/nm