El mandatario reiteró la víspera ante el Consejo de Derechos Humanos de la ONU la condena al conjunto de acciones punitivas y otras disposiciones ilegales, directas e indirectas, dirigidas a destruir la economía venezolana, desestabilizar el sistema democrático y acabar con el modelo social inclusivo de la Revolución bolivariana.
“Las acciones ilegales contra nuestro pueblo, ejecutadas por la élite imperialista de los Estados Unidos, por la élite neocolonial de la Unión Europea y otros Estados y organizaciones, han violado los derechos humanos de nuestro pueblo y el derecho al desarrollo”, subrayó el jefe de Estado.
Asimismo, Maduro repudió la sostenida campaña en la prensa internacional que pretende criminalizar a las autoridades y los migrantes del país sudamericano, junto a eventos desestabilizadores promovidos por Washington como intentos de golpes de Estado, incursiones mercenarias y paramilitares.
“Sabotaje a la infraestructura vital y a los servicios públicos se suman al plan de la guerra económica, que ha pretendido lo que ellos denominan un cambio de régimen, y tomar el control de los recursos naturales y las riquezas de Venezuela”, denunció el dignatario.
El estadista recordó que como parte de la política sancionatoria de Estados Unidos y sus aliados, el Banco de Inglaterra, con el apoyo del Gobierno del Reino Unido, mantiene secuestradas 31 toneladas de oro pertenecientes a las reservas internacionales del país sudamericano.
Maduro denunció además que el Novo Banco de Portugal tiene congelados más de mil millones de dólares de Venezuela, mientras el City Bank transfirió 342 millones de la nación bolivariana a una cuenta del Tesoro estadounidense de manera ilegal.
“Con este dinero pagan las operaciones de la organización criminal internacional, que basada en una ficción de reconocimiento a un Gobierno inexistente, ejecuta planes contra nuestro país”, alertó el dignatario.
Dichas instituciones financieras niegan el derecho al Estado venezolano a emplear recursos en la compra de vacunas, medicamentos, alimentos, o insumos en general en la lucha contra la pandemia de Covid-19, y para garantizar los derechos a la salud y a la vida del pueblo, indicó Maduro.
El presidente subrayó que las denominadas sanciones privaron a Venezuela del 99 por ciento de sus ingresos en divisas por exportaciones, y de al menos 30 mil millones de dólares en activos bloqueados en el exterior.
De igual forma, el mandatario venezolano alertó sobre las pretensiones de utilizar el Sistema Internacional de Derechos Humanos para sustituir gobiernos no alineados a los intereses hegemónicos de Occidente, e imponer fórmulas de colonialismo judicial a países soberanos.
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