En el informe, el director general de la Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA, siglas en inglés), Willie Walsh, aseguró que la recuperación postCovid-19 no varía con la variante Ómicron del SARS-CoV-2,causante de la enfermedad, pues las personas quieren seguir viajando, lo que aumentará cuando se eliminen las actuales restricciones.
Las previsiones del organismo indican que en 2022 el tráfico hacia, desde y dentro de Latinoamérica será fuerte, con limitaciones de viaje limitadas y flujos de pasajeros dinámicos dentro de la región y hacia y desde Norteamérica.
En medio de ese panorama, la IATA espera que las cifras de viajeros de 2019 se superen en 2023 en América Central en un 102 por ciento; en 109 por ciento en 2024 y en 115 por ciento en 2025.
El estudio de la IATA precisa que en 2021, el número de pasajeros en Centroamérica fue de un 72 por ciento en relación con los niveles de 2019, antes de la dolencia, muy por encima de Suramérica (51) y Caribe (44).
Además esperan que 2022 el indicador llegue al 96 por ciento de los niveles alcanzados hace dos años, por delante de Suramérica (88) y Caribe (72 ).
De su parte, el Aeropuerto Internacional de Tocumen, en la capital panameña, también pronosticó hasta el venidero 6 de marzo incrementos en el flujo de más de 60 mil pasajeros por el llamado hub de las Américas, asociado a los días de asueto por carnavales, incluso suspendidos para evitar mayor propagación de la Covid-19.
De este total, se espera que unos 29 mil 801 viajeros lleguen al país, y otros 30 mil 287 se movilicen hacia los diferentes destinos de Suramérica, Norteamérica y el Caribe.
La administración de la terminal aérea destacó que ese auge impactará positivamente al sector hotelero y turístico del país, contribuyendo con la reactivación económica, y alertó que se mantienen vigentes todas las medidas de bioseguridad debido a la pandemia.
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