Ubicado a unos 110 kilómetros de la ciudad cabecera y a 640 al este de La Habana, en este bello sitio las acciones se han fomentado desde el inicio de la temporada alta del turismo en el país el pasado 15 de noviembre.
Ellas incluyen nuevos convenios con pequeñas y medianas empresas para cumplirse en un futuro inmediato.
Desde finales de 2021, y tras los efectos de la pandemia de la Covid-19, se emprendieron allí diversas labores para recibir en mejores condiciones a los vacacionistas.
El programa tiene como objetivo la reactivación gradual del sector y ofrecer, asimismo, satisfacción y seguridad, factores cruciales para el repunte de la industria del ocio en el territorio.
Camagüey, con más del 20 por ciento de las playas cubanas, concentra en Santa Lucía su mayor capacidad hotelera, beneficiada por la reapertura de vuelos en el aeropuerto internacional Ignacio Agramonte, principal vía para el arribo de extranjeros.
Tras dos años muy complicados por las afectaciones e impedimentos que el Gobierno de los Estados Unidos impone en aras de evitar la llegada de líneas procedentes de ese país, la terminal vuelve a resurgir.
En tanto, la entrada de la aerolínea Viva Aerobus, procedente de Cancún, México, y los nuevos convenios con Nordwind, compañía Rusa, le han brindado un segundo aire.
Al referirse a las perspectivas del balneario, Yuneski Canteli González, delegada del Turismo en esta región al centro-este de Cuba, confirmó la existencia de capital humano con suficiente preparación para asumir, en cada una de las instalaciones, los protocolos sanitarios incluidos en la categoría Turismo Más Higiénico y Seguro.
Ese factor resulta crucial si tenemos en cuenta las exigencias del ramo, el cual representa una de las principales fuentes financieras de la isla y que ha sido duramente afectada luego de la pausa provocada por las contingencias que originó la situación pandémica.
A pesar del contexto, las posibilidades de Santa Lucía crecen cada año como uno de los destinos primordiales a nivel nacional. Muestra de ello es el premio Travellers´s Choice, otorgado por el sitio web TripAdvisor, concedido precisamente al Hotel Gran Club, propiedad de la cadena Cubanacán.
TripAdvisor en el último lustro ha considerado la promoción de las instalaciones camagüeyanas, a la vez que publicita mediante fotos y videos las potencialidades de este destino de sol y playa en el Caribe.
Además del Gran Club, en el litoral —con unos 22 kilómetros de playa— renacen otros alojamientos, entre los que sobresalen La Boca y Residencial Planta Real.
Este último fue inaugurado en 2019 solo para turismo internacional y con un servicio de cinco estrellas. Sus 28 habitaciones iniciales se sumaron a las mil 35 existentes en todo el polo turístico, cuya jurisdicción pertenece al municipio de Nuevitas, punto fundacional de Camagüey en 1514
El Gran Club deviene lugar preferido, fundamentalmente, por clientes de Canadá, el primer mercado emisor histórico durante la temporada invernal.
Sin embargo, también prevalecen visitantes de Rusia respaldados por el accionar del turoperador Pegas Touristik y sus agentes de viaje, quienes han frecuentado el territorio con el fin de evaluar sus atractivos.
Las playas de aguas cristalinas y belleza incalculable dan muestra de las características distintivas que predominan en Santa Lucía. Entre sus dotes naturales destaca una de las más extensas e importantes barreras coralinas del mundo, patrimonio que sobrepasa los 400 kilómetros.
A la vez, la ciencia y el Gobierno cubanos se enfocan en el cuidado y la protección de esta zona. La Tarea Vida, plan del Estado para el enfrentamiento al cambio climático, implementa en la actualidad un programa destinado a la conservación y recuperación integral de las playas arenosas del archipiélago. Proyecto que lidera el Ministerio de Ciencia Tecnología y Medio Ambiente.
(Tomado de Prisma)
