Tras una reunión entre el ministro alemán de Economía, Robert Habeck, y el primer ministro noruego, Jonas Gahr Støre, ambas partes anunciaron que comenzarán el análisis técnico de un proyecto de ese tipo.
En los próximos meses y años vamos a acelerar el desarrollo de fuentes alternativas de suministro de energía a Europa para reemplazar el petróleo y el gas rusos, así como desarrollar la infraestructura necesaria, informaron ambos en un comunicado.
Según refiere la agencia Bloomberg, Alemania adquiere en Rusia más de la mitad del gas importado por este país, un 50 por ciento de carbón y alrededor de un tercio de petróleo.
Recientemente, el canciller federal, Olaf Scholz, prometió aumentar la capacidad de almacenamiento de gas y carbón sobrante para reducir el riesgo de posibles interrupciones del suministro a su nación.
El problema con el combustible en Europa empeoró en el contexto de una operación militar llevada a cabo por Rusia en Ucrania y las sanciones contra Moscú impuestas por Occidente.
mem/to/amp