Sin más fondos, el país no puede permitirse atender al creciente número de refugiados, expuso Onek en declaraciones al portal Theeastafrican tras asegurar que la comunidad internacional recortó la asistencia financiera.
La noticia se produce luego que el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) anunció que el número de congoleños que buscan refugio en Uganda desde su país aumentó en los recientes meses tras los ataques de las milicias armadas contra la población civil en el este del país.
Solo la víspera cruzaron la frontera por el paso de Bunagana unos 13 mil congoleños que huyen de las acciones de grupos extremistas en la provincia vecina de Kivu Norte, dijeron las autoridades locales ugandesas.
El presidente de la localidad de Bunagana, Abubaker Nikyenje, pidió ayuda al gobierno central para que considere la posibilidad de construir refugios temporales para acoger a los refugiados.
Uganda es reconocida a nivel mundial por su política progresista en materia de refugiados, descrita por el Acnur como un modelo de asistencia basado en el desarrollo que otros países podrían emular.
La ministra dijo que plantearon la situación a la Organización de Naciones Unidas (ONU) en busca de más apoyo.
«No tenemos la capacidad de atender los altos números (de personas) con un apoyo tan mínimo de la ONU», expresó Onek.
La reciente afluencia de refugiados procedentes de la República Democrática del Congo elevó el número a cerca de 1,6 millones desde enero pasado. Además en Uganda viven acogidos de Sudán del Sur, Burundi y Ruanda.
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