El programa humanitario oficial en teoría permanecerá congelado en 13 mil 750 lugares por año, pero el compromiso adicional aumentará la cifra anual a 17 mil 875 hasta 2026.
Es el aumento más significativo de este tipo de programa desde que el ex primer ministro Tony Abbott ofreció 12 mil plazas adicionales durante dos años a refugiados sirios e iraquíes en 2015, después de una serie de conflictos en la región.
Sin embargo, aun no se llevará la aceptación humanitaria anual al mismo nivel que antes de la pandemia de la Covid-19, en los años 2018 y 2019, cuando el Gobierno tenía un objetivo de 18 mil 750 lugares.
El ejecutivo introdujo un nuevo tope de 13 mil 750 plazas al año, reduciendo en una cuarta parte el número de personas permitidas en el país por razones humanitarias.
Paul Power, director ejecutivo del Consejo de Refugiados de Australia, indicó que la comunidad pidió la restauración del programa humanitario al nivel de 2015, pero dijo que el anuncio tuvo un «comienzo fantástico».
El ministro de Inmigración, Alex Hawke, expresó que el compromiso le costará al presupuesto alrededor de 666 millones de dólares durante los próximos cuatro años.
Desde la llegada del movimiento Talibán al poder en agosto último, Australia ha recibido más de 32 mil 500 solicitudes para el programa humanitario de ciudadanos afganos, en nombre de más de 145 mil personas.
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