Esa pieza tuvo su estreno hace cuatro años durante la XXVI edición del Festival Internacional de Ballet, con sede en el Gran Teatro de La Habana Alicia Alonso, y la intervención principal de Dani Hernández, Patria Santamarina y Daniela Gómez, acompañados del cuerpo de baile.
Con música de Ezio Bosso, bajista, compositor y director de orquesta italiano, la obra reúne a nuevos bailarines y pasos más complejos, tras cuatro años ausente de los escenarios, así como incorpora un audiovisual en el momento de la apertura, realizado por Jenny Sanz y Fermín Vega.
“Es abstracta y responde a las sensaciones y sentimientos que provoca de manera individual el color rojo. Además, resulta difícil de comprender y de otorgarle un argumento específico. Tiene como inspiración el vestuario de Una rosa para Miss Emily, interpretada por figuras del BNC”, refirió Hernández.
A su juicio, la pieza exhibida por primera vez en la la cita con sede en esta capital transmitía una imagen poderosa y llena de simbolismo, sin embargo, los vestidos pasaban inadvertidos dentro de la obra y no eran protagonistas.
En La forma del rojo, la prenda constituye el elemento escenográfico principal y el color representa el argumento esencial de la historia, asociado a elementos de la naturaleza y las emociones, “mi coreografía es un gran cuadro en blanco que recibe brochazos y pinceladas de pintura”.
Hernández agradeció especialmente a los representantes masculinos por las horas de ensayo, pues ellos intervienen también en otras dos obras: Sinfonía para nueve hombres, de James Kelly, y La hora novena, de Gemma Bond, con una agenda prevista para la segunda mitad de este mes en el Teatro Nacional.
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