Desde el comienzo de la discusión televisada, los aspirantes al Palacio del Elíseo, quienes reeditarán el domingo el balotaje de las presidenciales del 2017, se acusaron mutuamente de presentar programas que no resuelven los problemas de los franceses, con el desafío para el mandatario de que tuvo que defender cinco años de gestión.
Yo seré la presidenta del día a día, del valor del trabajo, del poder adquisitivo, de la escuela, de la salud para todos, de la asimilación republicana y de la promoción social, esgrimió la representante de la extrema derecha, derrotada hace un lustro en las urnas por amplio margen, 66 a 34 por ciento.
Por su parte, Macron dijo ser exponente de un proyecto para hacer a Francia más independiente y fuerte, después de atravesar crisis sin precedentes, en particular la pandemia de la Covid-19 y el conflicto en Ucrania.
Las encuestas sitúan como principal preocupación de los ciudadanos la pérdida del poder adquisitivo, que según Le Pen lo sufren siete de cada 10 personas, situación ante la que prometió bajar los impuestos de combustibles y eliminarlos para los artículos de primera necesidad.
El jefe de Estado consideró las iniciativas de su rival ineficaces e injustas, y señaló que el programa que ella promueve no menciona el empleo para responder a los problemas sociales.
Respecto al papel de Francia en la Unión Europea (UE), Macron acusó a Le Pen de pretender abandonarla, lo cual la candidata por tercera vez al Elíseo desmintió.
Yo entiendo que usted quiere reemplazar la soberanía francesa por la europea, fustigó la diputada, quien expuso su visión de un bloque marcado por el respeto a las decisiones de sus países miembros.
El presidente y aspirante a la reelección insistió en su postura de fortalecer a la UE, lo que a su juicio potencia la independencia de París.
Otro tema polémico abordado en el debate fue la reforma de la jubilación proyectada por Macron, y con ella la llegada de la edad de retiro a los 65 años, en lugar de los 62 actuales.
La líder de la extrema derecha calificó la propuesta de “injusticia insoportable”, pero el mandatario la defendió y ripostó alegando que Le Pen no es clara sobre el asunto.
En 2017 la candidata nacionalista salió mal parada del debate, por lo que está por ver si le fue mejor frente al favorito de los sondeos y los entendidos, que le atribuyen a Macron el 55 por ciento de los votos en el balotaje del domingo.
car/wmr
