Hay un no categórico a la provisión de asistencia militar a Ucrania, pues eso significaría un paso para atraer a Bulgaria a ese conflicto, afirmó el mandatario.
De acuerdo con Radev, los llamados a la paz, a un pronto fin de la confrontación, se desvanecen gradualmente y son reemplazados por la retórica militar y llaman a la victoria.
El presidente expresó queo es necesario entender qué significa la palabra «victoria» y si significa la autodestrucción y la liquidación económica de Europa, entonces no creo que nuestros países deban moverse en esta dirección. Bulgaria debería ser parte del esfuerzo por traer la paz y poner fin al conflicto, pues prolongarlo sería perjudicial de muchas maneras, agregó.
Radev también expresó dudas sobre la necesidad de que una delegación gubernamental, encabezada por el primer ministro Kiril Petkov, visite Kiev mañana jueves.
El 24 de febrero último el presidente ruso, Vladímir Putin, anunció una operación militar especial en Ucrania en respuesta al pedido de ayuda de los líderes de las repúblicas populares de Donetsk y Lugansk.
Antes, el mandatario afirmó que el objetivo de la operación era proteger a la población de Donbass de los abusos y el genocidio por parte de Kiev durante los últimos ocho años, así como “desmilitarizar” a Ucrania.
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