Los bomberos laboran en el enfriamiento del camión cisterna cargado de gas licuado que daba servicios al hotel, en una operación que se presume resultó el origen de la deflagración.
El propio presidente Miguel Díaz-Canel afirmó que se trató de un lamentable accidente. El intendente del municipio Habana Vieja, Alexis Acosta, donde está el Saratoga, dijo antes que una fuga de gas provocó la fuerte explosión.
La onda expansiva fue tan fuerte que destruyó las fachadas frontales y laterales del Saratoga, pero también causó daños en una escuela primaria, edificios de vivienda, una iglesia y el teatro Martí, recién restaurado.
El Martí, a un centenar de metros del hotel Saratoga, perdió sus puertas y vitrales. Un balance preliminar indica nueve fallecidos, unos cuarenta heridos y 13 desaparecidos.
Los rescatistas buscan entre los escombros, mientras los bomberos enfrían el camión de gas licuiado para evitar otra explosión.
El primer secretario del Partido Comunista en La Habana, Luis Antonio Torres Iribar afirmó que «la situación está bajo control».
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