Si bien ninguno de los franceses salía con etiqueta de favorito en la tercera ronda, el público esperaba una sorpresa, sobre todo de la atleta de 19 años Diane Parry, superada ayer sin muchos problemas por la experimentada estadounidense Sloane Stephens, ganadora del Abierto de Estados Unidos en 2017 y finalista en el Garros un año después.
Las otras dos tenistas que permanecían en competencia en la meca de la tierra batida, Leolia Jeanjean y Alizé Cornet, cedieron este sábado, la primera 6-1 y 6-4 ante la veterana rumana Irina-Camelia Begu y la segunda abandonó por lesión frente a la prometedora china de 19 años Qinwen Zheng, quien se mostró muy superior.
Idéntica suerte corrieron los representantes masculinos, Hugo Gaston arrollado por la promesa de Dinamarca Holger Rune por triple 6-3, mientras el jugador de 37 años Gilles Simon no pudo con el difícil croata Marin Cilic, número 20 mundial.
Desde el título conquistado en 2000 por Mary Pierce, Francia no ha vuelto a tener una finalista en el Roland Garros, un escenario peor aún entre los hombres, que alcanzaron su última corona en 1983 con Yannick Noah y contaron en 1988 con Henry Leconte como finalista.
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