La sede del ente multilateral acogió en esta capital varias actividades dedicadas al reconocido intelectual, a quien algunos de los presentes en la jornada evocaron como un ser humano que nunca se despide y que acompaña por siempre las acciones de amor y creación.
Formaron parte del programa del tributo a Leal, una exposición con documentos y fotos, intervenciones de la directora general de la Unesco, Audrey Azoulay, y de la embajadora cubana Yahima Esquivel, y un coloquio con intelectuales y personas que compartieron con él en diversos momentos.
El presidente fundador de la asociación Cuba Coopération France (CubaCoop), Roger Grevoul, realizó la presentación de la muestra en el Salón de los Pasos Perdidos, donde durante una semana podrá apreciarse en imágenes y textos facetas del artífice de la restauración del centro histórico de La Habana, declarado Patrimonio Cultural de la Humanidad.
Eusebio el promotor de un sueño hecho realidad en la capital de la isla, el embajador de la cultura cubana, el luchador social, el revolucionario, el amigo de Francia y el hombre sencillo, resultan aristas que garantizan un acercamiento a su figura en pocos minutos.
Nunca me ha sido fácil hablar de una personalidad de tal envergadura y grandeza, uno de los más grandes cubanos de todos los tiempos, afirmó con emoción el académico y diputado Eduardo Torres Cuevas, quien durante su aporte al coloquio siempre se refirió a Leal en presente.
De acuerdo con el prestigioso historiador, en su amigo se articulan de modo armonioso los diversos componentes del conocer, sentir, amar y pensar, lo que explica su destaque como escritor prolífico y excelente orador.
Torres Cuevas recordó que Leal mereció la investidura de Doctor honoris causa y de profesor emérito de una veintena de universidades, pronunció conferencias magistrales en al menos 74 casas de altos estudios de más de 40 naciones y recibió altas condecoraciones de unos 30 países.
“Me gustaría decirles que no se va, se queda entre nosotros en el alma de los que amamos, creamos y creemos”, sentenció en el foro en la Unesco, donde también ofrecieron testimonios sobre el historiador de La Habana el intelectual francés Paul Estrade y Jean Mendelson, exembajador galo en Cuba, entre otros.
En el acto organizado por la Misión Permanente cubana ante la Unesco y CubaCoop, la directora general del ente multilateral, Audrey Azoulay, expresó emoción por rendir homenaje a “un hombre excepcional y de acción, un maestro que soñó con una utopía, que realizó una gran labor para llevarla a cabo, y un gran amigo de la Unesco”.
Por su parte, la embajadora Esquivel agradeció en nombre de la isla la amplia participación en las actividades de diplomáticos y de representantes de diversos sectores de la sociedad francesa.
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