Según indicó el medio, los dirigentes europeos tienen previsto reunirse este jueves con el presidente ucraniano, Vladimir Zelensky.
Ayer, el jefe de Estado francés, de visita en Rumanía, manifestó que su homólogo ucraniano tendrá que negociar con Rusia y señaló que la dirigencia europea también debería participar en ese diálogo y actuar como garante de la seguridad.
Macron advirtió que la Unión Europea, Ucrania y Rusia están en el mismo continente. “Queremos la paz, queremos que un día haya un alto el fuego y se reanude la discusión”, subrayó.
Acerca del viaje a Kiev de los dirigentes de Alemania, Francia e Italia, el vicepresidente del Consejo de la Federación de Rusia (Cámara Alta del Parlamento), Konstantín Kosachov, declaró que los vecinos occidentales de Ucrania están patrocinando su autodestrucción por motivos geopolíticos.
“Y la prevista visita de la eurotroika a Kiev, si tiene lugar según un escenario preestablecido, solo empujará a Ucrania aún más cerca de una catástrofe nacional definitiva en lugar de ayudarla a convertirse en un país verdaderamente europeo”, publicó en su canal de Telegram.
Los objetivos declarados de la visita son la continuación de la ayuda militar y económica a Ucrania, la exportación de grano y otros bienes que necesita Europa y las perspectivas de adhesión del país a la Unión Europea.
En opinión del senador ruso, la importancia de dichos objetivos es demasiado alta solo para los actuales dirigentes de Kiev.
Subrayó que los ciudadanos de Ucrania deberían considerar más importante que cualquier otra cosa la perspectiva de la reconciliación en la sociedad y la restauración de la unidad nacional.
Kosachov significó que los líderes europeos reunidos en Ucrania “no tienen planes para ayudar a restablecer la paz civil en el país y reanudar el diálogo civilizado entre las sociedades”.
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