Ese órgano de justicia consideró que las localidades de la provincia de Lublin (este) «vulneraron el derecho al respeto a la vida privada y familiar, la libertad de expresión y la prohibición de discriminación por motivos de orientación sexual e identidad de género”.
El fallo se produjo tras una deliberación a puerta cerrada y resuelve cuatro de nueve disputas elevadas por la oficina del Defensor del Pueblo contra esos ayuntamientos.
La sentencia reconoce la vulneración de los derechos y subraya que la declaración de esas localidades «interfiere en la dignidad y la vida privada del grupo de vecinos».
Esta la primera sentencia definitiva relacionada con las «zonas libres de LGBTI» instituidas en 2019 en cerca de 100 localidades polacas, lo que provocó reacciones de condena y sanciones desde la Unión Europea (UE).
Un estudio publicado por la organización no gubernamental ILGA calificó a Polonia, por segundo año consecutivo, como el país de la UE más hostil hacia ese colectivo.
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