FotosPL: Maria Julia Mayoral
Desde diferentes áreas del conocimiento, los ponentes abordaron el legado de Neto (17 de septiembre de 1922-10 de septiembre de 1979), y Fidel (13 de agosto de 1926-25 de noviembre de 2016), y el papel de ambos líderes en el establecimiento y el desarrollo de los nexos entre Angola y Cuba.
Ellos demostraron al mundo las ventajas de la amistad y la solidaridad cuando acordaron, al inicio de la construcción de la nación angolana, la implementación de la ayuda internacionalista, estimó la viuda Maria Eugénia Neto, quien encabeza la Fundación dedicada a divulgar la vida del patriota, escritor y poeta.
Según recordó la embajadora Esther Armenteros, a Neto le cabe la gloria de haber cumplido el sueño de lograr una patria unida, de Cabinda a Cunene (desde el norte hasta el sur), en medio de adversidades y peligros inmensos.
La funcionaria cubana distinguió la ética del estadista, su profundo pensamiento antiimperialista y la amistad fraternal que lo unió a Fidel, al General de Ejército Raúl Castro y al pueblo de la mayor de las Antillas.
Para el historiador y profesor universitario Fernando Jaime, la nación caribeña abrió los brazos al mundo y en particular a este continente desde los tiempos de las batallas contra el colonialismo, y «fue en Angola, la patria de Neto, donde Fidel y el pueblo cubano dieron pruebas de humanismo sin par”.
A lo largo de varias décadas, la cooperación permitió incorporar a la red asistencial a más de tres mil médicos y otros profesionales de la salud formados en la isla, ejemplificó la doctora Yilian Jiménez.
Además, un equipo de 300 profesores, de conjunto con colegas angolanos, inauguraron cinco facultades de Medicina en las provincias de Huila, Benguela, Huambo, Malange y Cabinda, de las cuales egresaron alrededor de dos mil galenos, abundó la jefa de la misión médica.
A partir de 2021, informó, con la inauguración aquí de hospitales de tercer nivel de atención especializada, equipos de médicos cubanos de muy alta experticia, en cirugía cardiovascular, fertilización asistida y trasplante de medula ósea, comenzaron a laborar en programas de asistencia y asesoramiento para expandir los servicios.
En el terreno de la educación el saldo de la colaboración resulta igualmente notable, fundamentó la jurista Liliana Vilar, al describir los principales hitos durante más de 45 años de intercambio.
El Centro Cultural António Agostinho Neto en la provincia de Luanda sirvió de sede al encuentro, donde la Fundación recibió una obra del artista cubano Yasiel Palomino, inspirada en la amistad.
Académicos, historiadores, militares, representante del Gobierno e integrantes del cuerpo diplomático de países amigos participaron en la cita, cuyo preámbulo fue con ofrenda de flores al pie de un busto a Neto en el municipio de Icolo y Bengo, su terruño natal.
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