Por ese ataque Campillai perdió los sentidos de la vista, el gusto y el olfato, además de sufrir fracturas craneales.
De acuerdo con el dictamen del tribunal, el otrora policía “expuso a la víctima a graves lesiones y secuelas físicas, destruyendo su proyecto de vida”.
La Fiscalía solicitó una condena de 12 años de prisión para el expolicía, sanción que será leída el próximo 10 de octubre.
“Se ha hecho justicia”, afirmó la legisladora en las afueras del Tribunal Oral en lo Penal tras conocer el fallo.
El 18 de octubre de 2019 comenzó en esta capital un movimiento impulsado por estudiantes contra el alza de la tarifa del metro, que posteriormente se extendió por todo el país y demostró el descontento de la población con las desigualdades sociales y el modelo neoliberal.
Las protestas fueron violentamente reprimidas por los carabineros y las fuerzas armadas, con saldo de cerca de 30 muertos, miles de heridos y 460 personas con daños oculares producto del disparo de perdigones o bombas lacrimógenas.
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