Según el sondeo del Instituto Francés de Opinión Pública (IFOP) para el semanario Le Journal du Dimanche, la satisfacción con el trabajo del mandatario subió un punto respecto a agosto para situarse en un 38 por ciento, mientras el descontento bajó tres y alcanza a seis de cada 10 entrevistados.
La impopularidad de Macron se manifiesta en todos los sectores, salvo en los simpatizantes conservadores y de su propio partido, La República en Marcha, al margen de factores como la edad, la profesión y el lugar de residencia.
Para el director general del IFOP, Frédéric Dabi, el contexto es de malestar social por el tema del poder adquisitivo, deteriorado por meses de elevada inflación.
Por su parte, la primera ministra ganó dos puntos de apoyo en septiembre, tras ser considerada por los encuestados “seria, trabajadora, determinada y confiable”.
lam/wmr