Existe una capacidad política para contrarrestar los ataques en la red de redes, hay salida ante esa maquinaria de intoxicación, aseguró Elizalde al intervenir en la jornada inaugural del II Foro de Gobernanza de Internet que se efectúa en el capitalino Palacio de Computación.
Cuba –puntualizó- es un polígono de prueba, tanto en metodología, como en técnicas de guerra cognitiva, que les sirve a ellos para llevarla a la práctica en otras latitudes.
En la guerra cognitiva –superior a la psicológica- se disputa el cerebro de las personas, y tiene entre sus características resetear la consciencia de los individuos, afectar el conocimiento, saturar la atención y hasta provoca errores de juicios, explicó Elizalde.
La agresión mediática parece ser un fenómeno reciente, pero no lo es, pues data de los tiempos del presidente de Estados Unidos, John Fitzgerald Kennedy (1917-1963).
La máquina de intoxicación –que tiene como objetivo dar un volumen inusitado de percepción de que muchas personas siguen una noticia- está dirigida a diferentes públicos por ejemplo, jóvenes, intelectuales y académicos. Este proceso ocurre de manera sincronizada.
Existen los actores de la polarización, elenco encabezado por los maestros de ceremonia que son los influenciadores, encargados de enmarcar la agenda, el coro, dedicado a la amplificación del mensaje con cuentas automatizadas y los ciborg, un humano operando muchas cuentas.
También actúan los troles, que son animadores y los golers, con una cuenta de ataque suicida, agregó la especialista.
La también periodista cubana recomendó profundizar los estudios sobre las plataformas sociales a partir de antropología.
Aclaró que los principales operadores políticos en la red de redes son grupos pequeños numéricamente pero muy fuertes en recursos de todo tipo, y siempre respondiendo a Estados Unidos.
jcm/joe