La pesquisa de dos semanas logró una cobertura total en las comunidades del sector en las regiones Oriental y Occidental, así como en las zonas del distrito Capital y el departamento Central, añade el texto del Instituto Nacional de Estadísticas.
Censistas y supervisores de los 19 pueblos indígenas del país austral aplicaron los instrumentos del proceso en unas 700 comunidades, aldeas, barrios y núcleos de familia en 14 departamentos.
“Culminamos un gran operativo iniciado el 9 de noviembre, un trabajo exitoso, que nos permitió llegar al 100 por ciento de las comunidades y a un 98 por ciento de las viviendas indígenas”, explicó Nélida Otazú, responsable del operativo censal.
El Estado organiza ahora un proceso de recuperación para alcanzar la totalidad de las residencias indígenas aún sin censar, estimadas en un dos por ciento, que quedaron fuera de la muestra por distintas razones.
Estas últimas comprenden problemas de liderazgo comunitario, opciones religiosas, o viviendas en zonas de conflicto, como es el caso del norteño departamento de Amambay, añadió la especialista.
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