En el comunicado el organismo estatal recordó que el pasado mes de diciembre se ordenó a la filial de Amazon en Francia «modificar lo antes posible, y a más tardar antes del 22 de marzo de 2022, determinadas cláusulas de sus condiciones contractuales aplicables a terceros vendedores presentes en su plataforma”.
La sentencia se fundamentó en particular en un desequilibrio significativo de estas condiciones contractuales a favor de Amazon, razón por la cual se impuso una una multa coercitiva de 90 mil euros por cada día de retraso “aplicable en caso de incumplimiento por parte de la empresa Amazon a partir del 22 de marzo de 2022”, precisó el organismo.
Pero ante su cumplimiento tardío, fechado el 28 de abril de 2022, la multa ascendió a “3,33 millones de euros”, que ahora reclama el órgano sancionador apelando “por primera vez, a la nueva facultad de amonestación prevista en el Código de Comercio», que permite fijar montos de medidas disuasorias sanciones, de hasta el 1% de la facturación global.
En 2019, Amazon ya fue condenada por el Tribunal de Comercio de París a una multa de 4 millones de euros «tras una citación del Ministro de Economía», al encontrarse «varias cláusulas desequilibradas en el contrato que Amazon impuso a las empresas que utilizan su mercado en línea».
Un año después una nueva investigación, iniciada por el Servicio Nacional de Investigación (SNE) de la oficina de Represión del Fraude sobre las condiciones contractuales impuestas por Amazon a terceros vendedores, «había conducido al hallazgo de nuevas irregularidades».
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