Así aseguró en conferencia de prensa en esta capital Miriam Alpízar viceministra del MES, quien enumeró entre las prioridades de esa política innovar en sistemas de enseñanza, actualizar las practicas de evaluación, mejorar la acreditación de las universidades y sus vínculos con la sociedad para aportar a las necesidades del desarrollo económico y social.
María Victoria Villavicencio, directora de Relaciones Internacionales del MES, se refirió por su parte a las principales tendencias mundiales en este campo, entre ellas la necesidad de incorporar contenidos internacionales en los currículos, desarrollar laboratorios cooperados, así como programas de pregrado y posgrado en coordinación con universidades de otras naciones.
También es tendencia la internacionalización de las investigaciones y la posiblidad de relacionar a los científicos de la isla con las principales redes científicas y que participen en proyectos de alto impacto, para lo cual -dijo-, constituye una fortaleza el talento formado por las universidades de la isla con profesores altamente reconocidos en otras latitudes.
Consideró igualmente como una necesidad continuar fortaleciendo los claustros, con la incorporación de los profesores a becas, proyectos e investigaciones de manera tal que estén en constante intercambio con las universidades extranjeras con las cuales existen relaciones de trabajo e intercambio.
Villavicencio señaló que es cada vez más fuerte el vínculo de las universidades con la sociedad y el mundo empresarial en busca de lograr resultados concretos en el desarrollo de las localidades y territorios.
Sobre esto último, Maiky Díaz Pérez, jefa del Departamento de Asuntos Multilaterales del MES, afirmó que actualmente se encuentran en ejecución 64 proyectos de cooperación internacional que tributan al plan económico cubano.
Puntualizó que 17 de las 22 universidades del país encabezan proyectos que reponden a objetivos del plan nacional de desarrollo económico y social, incluso en programas priorizados como el de seguridad alimentaria y el de transformación de la matriz electroenergética, en coordinación con los organismos directamente responsabilizados en esos temas.
Detalló que en esos proyectos intervienen las universidades cubanas con los organismos nacionales y con entidades extranjeras, incluidas agencias de la ONU.
Recordó que la cooperación internacional es una política recogida en la Constitución sobre la base de fomentar las relaciones entre Estados, dispuestos a establecer relaciones recíprocas de soberanía, respeto y solidaridad, y se interconecta con el plan de desarrollo económico y social.
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