El pasado 7 de diciembre, Sanjinés llegó a La Habana para presentar su nuevo filme Los viejos soldados, como parte de las actividades programadas en la recién concluida edición 43 del Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano.
De hecho, él es miembro fundador de la cita cinematográfica habanera, junto a otros grandes como el brasileño Glauber Rocha y el argentino Fernando (Pino) Solanas.
Además, resulta uno de los mayores exponentes del Nuevo Cine Latinoamericano, movimiento nacido en la década de 1960 que se alejó de los mecanismos comerciales y se propuso rescatar las costumbres de los pueblos.
Para el reconocido director boliviano, el surgimiento de esa corriente se debió a la necesidad de hacer películas “diferentes, con contenido ideológico, que contrastaran con el mercantilismo que en ese momento gobernaba el mundo”.
A sus 86 años aún mantiene viva su chispa creadora y recientemente concluyó su nueva película, Los viejos soldados, obra ambientada en la Guerra del Chaco, que narra la historia de Guillermo, un joven de la burguesía, quien salva de la muerte a un campesino aymara.
El filme tuvo su estreno mundial hace unos pocos días en Cuba, en el marco del Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano.
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