Un funcionario de la Fiscalía Nacional dijo a los medios de prensa que esperaban en el Tribunal de Primera Instancia de Boksburg que no había ningún caso legal contra el chofer ya que la Policía aseguró carecer de evidencias criminales suficientes en su contra.
El chofer había sido arrestado el pasado domingo luego de recibir tratamiento médico por heridas menores en un hospital privado, informó la portavoz de la policía de Gauteng, Brenda Muridili.
Según trascendidos, las autoridades buscaban enjuiciarlo bajo múltiples cargos de homicidio culposo, conducción negligente, daño malicioso a la propiedad, y provocar de manera no intencional una explosión que resultó en hasta ahora 18 muertes, y más de un centenar de heridos.
Sin embargo, finalmente esas acusaciones no fueron respaldadas por la investigación pericial.
El pasado sábado el vehículo con gas licuado estalló bajo un paso superior una zona residencial de Boksburg, municipio metropolitano de Ekurhuleni, al este de Johannesburgo, provocando, entre otras afectaciones, el colapso de ala de servicios de urgencias del hospital OR Tambo Memorial, a 100 metros del lugar.
Acorde con testigos presenciales, el conductor del camión intentó pasar por debajo de un puente de baja altura respecto a la del vehículo, quedándose atascado.
La fricción generada por el contacto entre el metal y el concreto habría provocado la explosión.
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