El evento llegará a las provincias Pinar del Río, La Habana, Matanzas, Cienfuegos, Santa Clara, Camagüey, Santiago de Cuba y Guantánamo, y esa edición estará dedicada a los instrumentos musicales, como parte esencial de la identidad cultural de los pueblos.
Este año se enfocará en los tambores Batá, con el objetivo de generar conciencia sobre la importancia del legado africano, principalmente en la religión Yoruba, y destacará su relevancia en la rumba y en los patrimonios materiales e inmateriales de la isla antillana, señaló el poeta cubano Miguel Barnet, en conferencia de prensa.
El Festival se centrará en las comunidades cultoras de la rumba, como escenario fundamental de la trasmisión oral de este acervo musical, en colaboración con la OPLA (Objetivo Patrimonio Legado Africano).
Como parte del programa, el Ministerio de Cultura organizará conciertos, espectáculos danzarios, así como visitas a sitios históricos y encuentros en los barrios con personajes emblemáticos de este ámbito.
La ruta de la rumba también prevé fortalecer el turismo sostenible, como una herramienta clave para proteger, fomentar y potenciar los patrimonios culturales, con el objetivo de conocer a Cuba mediante su más auténtica cultura popular.
lam/mml/yap
