Según la Federación de Exportadores de Vinos y Espirituosos (FEVS), la pandemia provocó el cierre de restaurantes, clubes, cafés y hoteles en todo el mundo, a lo cual se atribuye un descenso cercano al 20 por ciento en el valor de los envíos franceses de sus reconocidos licores.
También devastador para las exportaciones vinícolas fueron los conflictos con Estados Unidos, enmarcados en el diferendo Boeing-Airbus entre Washington y la Unión Europea y la iniciativa francesa de establecer impuestos para los gigantes de Internet, la llamada Ley GAFA (acrónimo de Google, Amazon, Facebook y Apple).
La administración del ahora expresidente Donald Trump fijó en octubre de 2019 impuestos de aduana del 25 por ciento a los vinos embotellados galos no efervescentes y con menos de 14 grados.
De acuerdo con la FEVS, las importaciones desde la nación norteña cayeron un 50 por ciento en los primeros 10 meses del 2020, con pérdidas estimadas en más de 500 millones de dólares.
En ese sentido, consideró que las sanciones arancelarias estadounidenses representan la mayor preocupación, por tratarse del principal mercado, su prolongada duración -16 meses- y el recrudecimiento del 12 enero, apenas ocho días antes de la salida de Trump de la Casa Blanca.
Líderes del sector vitivinícola francés llaman al gobierno de su país y a la Unión Europea a buscar con el presidente estadounidense, Joe Biden, negociaciones que resuelvan los conflictos transatlánticos.
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