Cortizo, en una comunicación grabada en video y distribuida a la prensa, señaló que la acción tiene “el propósito de honrar la existencia truncada de los hijos de nuestra nación que no lograron sobrevivir a las garras de esta enfermedad despiadada”.
El mandatario dijo, además, que “los fallecidos no son solo una estadística, no lo podemos ver así; cada una de las víctimas tiene un rostro, una identidad personal, un significado especial para sus padres, hijos, hermanos, familia y seres queridos que hoy las lloran”.
A los dolientes les dijo que comparte su sentimiento, angustia y dolor y pidió la unidad de la nación “más que nunca” para proteger la vida de cada ciudadano, al tiempo que demandó la participación responsable de todos, porque “Panamá no puede permitir el sacrificio de más vidas”, enfatizó.
El gobernante, junto a la ministra de Gobierno, Janaina Tewaney, firmó el Decreto Ejecutivo 295 que declaró la jornada, el cual ordenó que la bandera nacional sea enarbolada a media asta, “en memoria de los compatriotas que han perdido la vida a consecuencia de la pandemia por la Covid-19”.
Como parte de los esfuerzos gubernamentales por enfrentar la crisis sanitaria, el ministro de Salud, Luis Fernando Sucre informó ayer que realizó contactos internacionales, entre ellos mantuvo un encuentro con la embajadora de Cuba en esta capital, Lydia Margarita González y otros funcionarios de esa sede y posteriormente realizó una videollamada a su homólogo cubano, José Ángel Portal.
En una comparecencia pública Sucre explicó que con los diplomáticos hablaron de las experiencias en el manejo de la pandemia, mientras con el titular cubano “el intercambio fue enriquecedor”, afirmó y agregó que también habló virtualmente con autoridades de Singapur.
“Durante estas reuniones el ministro intercambio experiencias médicas, científicas, sociales y económicas que se aplicaron en estos países para el combate efectivo de la Covid-19”, señaló una nota oficial del Gobierno.
En las últimas horas el Ministerio de Salud informó que se elevaron a 50 mil 373 los infectados y hasta el momento en julio hubo 369 defunciones, cifra que superó las 295 de junio que era el récord hasta el momento.
Una tabla interactiva del diario La Prensa, confeccionada a partir de información oficial, reveló que Panamá tuvo la tasa de 5,57 muertes por 100 mil habitantes entre el 8 y el 15 de julio pasados, el segundo lugar del mundo, precedido por Perú (5,73) y seguido de Brasil (5,05), Chile (4.68), México (4,65) y Bolivia (4,59).
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