Entre las razones esgrimidas que justificarían esta caída en 2020, la institución sanitaria citó el alto número de contagios por el virus SARS-CoV-2 tanto en donantes como en pacientes, así como el importante descenso del número de accidentes de tráfico, una de las principales vías para las donaciones.
Durante el primer confinamiento, en la primavera, ‘vimos disminuir el número de accidentes vasculocerebrales y de víctimas de traumatismos graves por accidentes de tráfico’, explicó el director de extracción de órganos de la agencia, Francois Kerbaul, y a ello hubo que sumar la saturación de los hospitales y los quirófanos debido a la epidemia.
Esta merma de las donaciones significó un aumento en la lista de los pacientes en espera, 921 de los cuales murieron por haber transcurrido demasiado tiempo o haber contraído la Covid-19, mientras que el número total de trasplantes realizados llegó a cuatro mil 417 los trasplantes, una cuarta parte menos que el año anterior.
Para invertir la tendencia en 2021, la Agencia pretende mejorar las redes de recogida en determinadas regiones, especialmente de la de París, según recogió el informe.
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