Según declaró el gobernador del Banco de Francia, Francois Villeroy de Galhau, “el sector bancario en Francia se concentra en torno a seis grandes bancos, todos ellos con un modelo de negocio estable y rentable, un fuerte control del riesgo y un alto grado de cumplimiento de las normas”, dijo.
En relación con las turbulencias en los mercados derivadas de la compra de Crédit Suisse y la quiebra del Silicon Valley Bank en Estados Unidos, aseguró que “ninguno de estos problemas concierne a los bancos franceses”.
Tanto el gobernador del Banco de Francia como el ministro de Economía del país, Bruno Le Maire, acogieron con satisfacción la decisión de las autoridades suizas de permitir la compra de Crédit Suisse por UBS, por un valor de unos 3 mil 40 millones de euros.
Para Villeroy “Crédit Suisse se trataba de un banco que tenía un modelo de negocio y un problema de rentabilidad desde hacía varios años y que adolecía de controles internos insuficientes”, por lo que el respaldo de las autoridades suizas “es una solución bienvenida”.
En las misma línea se expresó Le Maire al considerar que la fusión entre los dos bancos suizos culminó con “un buen acuerdo”, a pesar de lo cual “hay que vigilar de cerca los efectos indirectos de la reciente volatilidad bancaria y financiera, como nos han recordado los recientes acontecimientos provocados por el cierre del Silicon Valley Bank en Estados Unidos”, dijo.
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