El pulso político y social siguió este martes con multitudinarias protestas y la continuación de las huelgas, contexto en el cual los sindicatos se reunieron y acordaron mantener la presión en rechazo a un proyecto que extiende la edad legal de retiro de 62 a 64 años.
Sin embargo, la jornada cierra con una noticia alentadora, la invitación de la primera ministra Elisabeth Borne a la Intersindical a un encuentro la próxima semana, aunque de momento no hay detalles de los temas a abordar.
Antes de hoy, el Gobierno aceptó el diálogo, pero para discutir sobre otras cuestiones relacionadas con el empleo, después que el presidente Emmanuel Macron instara a los franceses a pasar la página asumiendo la reforma.
El secretario general de la Confederación Francesa Democrática del Trabajo (CFDT), Laurent Berger, fue quien informó sobre la invitación de Borne, cuyo entorno confirmó que la reunión tendría lugar entre el lunes y el miércoles.
Más temprano, Berger propuso al Ejecutivo congelar la reforma y comenzar un proceso de mediación, con el objetivo de calmar tensiones que se tradujeron en los últimos días en episodios de violencia.
Por su parte, el líder de la Confederación General del Trabajo (CGT), Philippe Martinez, compartió con la prensa antes del comienzo de las movilizaciones de este martes la decisión de la Intersindical de enviarle una nueva carta a Macron, con la propuesta de detener su reforma de la jubilación para entablar negociaciones que busquen el fin de la crisis en curso.
De acuerdo con la CGT, dos millones de personas desfilaron este martes en Francia contra el proyecto, mientras autoridades cifraron la participación en 740 mil.
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