La víspera se cerró definitivamente el telón para el musical más antiguo en esta meca del género, donde vio su estreno el 26 de enero de 1988, con música y libreto firmados por Andrew Lloyd Weber y basado en la novela homónima de Gastón Leroux.
El fantasma de la ópera en estos años ganó, entre muchos galardones, siete premios Tony, los más prestigiosos del teatro en Estados Unidos, y deleitó a más de 20 millones de espectadores en tanto superó los mil 300 millones de dólares recaudados en taquilla.
Este musical antes vio la luz en el West Eand de Londres, Reino Unido, en 1986, entonces dirigido por Harold Prince y protagonizado por Michael Crawford y Sara Brightman, sus primeros intérpretes.
De acuerdo con reseñas culturales que recrearon la noticia, la presentación regular de la obra sucumbió por la reducción de espectadores tras la pandemia.
La despedida mundial ocurrió en presencia de su creador y el equipo del espectáculo recibió una larga ovación de pie del público, mientras la famosa araña, elemento estrella de uno de los actos más memorables del espectáculo, hacía su última aparición en la sala de mil 600 butacas.
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