La ceremonia, efectuada en la Ciénaga de Zapata, lugar por donde desembarcaron el 19 de abril de 1961 las tropas mercenarias organizadas, financiadas y dirigidas por Estados Unidos, se rindió tributo a los protagonistas de esta gesta que significó la primera gran derrota del imperialismo en América Latina.
En representación de los veteranos de Girón, el teniente coronel Arnaldo Hernández destacó la importancia de esa batalla con la que se frustró en menos de 72 horas la intentona de tomar una cabeza de playa que serviría de pretexto para una intervención militar estadounidense, con el propósito de derrocar al gobierno revolucionario.
Pretendían arrebatarnos la esperanza, la libertad; los protagonistas de la Revolución triunfante vivíamos momentos convulsos y decisivos, no había otra alternativa que defender la justicia conquistada ante el llamado de Fidel (Castro), expresó Hernández.
Por su parte, Claudia Herrera ratificó la gratitud y el compromiso de las nuevas generaciones con las que enfrentaron la arremetida militar.
En el acto fueron disparadas 21 salvas de artillería honor a los caídos en la epopeya revolucionaria, y se entregaron carnés del Partido Comunista de Cuba y la Unión de Jóvenes Comunistas a nuevos militantes de esas organizaciones.
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