Esos avances están presentes en la obtención de alimentos, en la siembra de diversas variedades de plátano vianda y fruta, boniato, yuca con altos rendimientos, así como papa ecológica, café arábico en el llano que compite con los mejores de la montaña.
El amor a la tierra y el deber de hacerla producir aplicando la ciencia y la técnica acompañan a jóvenes emprendedores y avezados miembros de las Cooperativas de Producción Agropecuaria, de un territorio donde viven unas 70 mil personas, cerca del 30 por ciento con ancestros isleños.
Entre la nueva generación sobresale Yoandi Rodríguez, quien se alzó con el premio Hombre Habano en la categoría de productor más joven en tabaco tapado en Cuba, después de tres campañas de estar aspirando a este reconocimiento.
Prensa Latina lo acompañó por su finca, la cual luce una batería de cinco casas de cura controlada que deben cumplir con alojar este año cerca de 35 mil cujes de este cultivo, un aproximado a 400 quintales. Sus hojas de excelente calidad beneficiarán los puros de exportación.
El declarado el rey del tabaco tapado en el país comentó que su estrategia es crecer a la par de la tecnología con nuevos proyectos para cumplir con la iniciativa nacional de llevar alimentos a los mercados de la provincia y cumplir con pedidos de otros territorios, afirmó.
Con un poco más de tres lustros de recibir tierras en usufructo, se ha convertido en referencia por sus resultados y el aporte brindado en la experimentación de plantaciones exóticas.
Las prácticas que acompañan a los productores en este municipio, tienen sus raíces, a decir de Eliecer Pérez, de la Cooperativa de Créditos y Servicios Nieves Morejón, en el aporte de la migración de las Islas Canarias, sobre todo conocedores del cultivo del tabaco en sus islas.
La batalla que debemos librar es con los recursos naturales, la iniciativa y la creatividad lograr mayor eficiencia para que los cultivos eleven los rendimientos, subrayó.
En los bateyes de las cooperativas crecen las iniciativas para la mayor utilización de fertilizantes orgánicos como humus de lombriz, compost, así como insecticidas biológicos y otros productos naturales, en sustitución de los químicos importados.
También sobresalen en esta parte central del país los productores de las cooperativas La Cuba Nueva y La Nueva Cuba, cuyos resultados superan los planes de producción en diversos cultivos a partir de introducir variedades altamente productivas.
En el intercambio con campesinos de Cabaiguán se pudo constatar que existe un auge productivo por elevar la eficacia y el sentido de pertenencia, el amor por superar los obstáculos y cumplir con las producciones que demanda la familia cubana.
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