La colaboración de la Embajada de Japón hace posible también cada año este encuentro dedicado al arte de las letras en Japón, y que en esta oportunidad tiene la presencia del reconocido escritor Keiichiro Hirano, invitado por la Unión Nacional de Escritores y Artistas de Cuba (Uneac).
La apertura de la jornada con la exposición Shin No Tamashi, Almas Verdaderas, aconteció en la Biblioteca Julio Antonio Mella, ubicada en los predios del Parque Agramonte, sitio fundacional de la otrora Villa del Puerto del Príncipe hace más de medio milenio.
Los presentes pudieron disfrutar de la obra de la plástica , a cargo de Orlando García, además de un performance.
“El Shodō, o caligrafía japonesa, compite en rigor y disciplina con cualquier arte, ya sea marcial u otra, la construcción de la idea desde la perspectiva zen, contenedor de una profundidad minimalitsta y transportadora, pone en perspectiva la interpretación que podemos tomar de cualquiera de estas obras”, a decir del curador Juan Carlos Gil.
El Hanami que indica el florecer de la naturaleza, llega precisamente en la primavera hasta esta región y atrae a los amantes de la cultura del país del Sol naciente quienes fueron testigos de la presentación del libro Cierto Hombre, de Keichiro.
Es este el primer texto traducido al español, del laureado artista con premios como el Yomiuri, además se programó la presentación de la película del libro homónimo en las salas de cine de la ciudad.
El artista aseguró ser parte de la generación de los 90 cuando los patrones culturales tuvieron incidencia por el fin del socialismo.
“Japón tenía que replantearse la relación con Rusia y China, además de tener internamente otro periodo político. Una época de cambio, y luego llegó el Internet”, expresó el escritor asiático.
“También hubo incertidumbre porque a finales de los 90 hubo desde desastres naturales hasta ataques terroristas. Se enfrentó una crisis económica. Hubo mucha inseguridad”, aseguró.
“El libro Cierto Hombre, se trata de una mujer rural en Japón cuyo esposo muere en un accidente. Luego ella descubre que su marido no era quien decía. Ella estuvo confundida sobre su identidad.
“Solicita una investigación y el protagonista es el abogado que contrata, quien pertenece a la tercera generación de coreanos en Japón. Una historia de discriminación de coreanos en Japón”.
Japón ocupó de 1910 a 1945 Corea, en medio de conflictos bélicos que incidieron en la perspectiva de los individuos hacia los coreanos, según el propio Keiichiro.
“Aún existe esa discriminación. Me gustaría pensar en la identidades no solo con el tiempo, sino además desde el punto de vista espacial.
“La identidad en nuestro pasado ocupa un espacio muy grande, pensar en él nos ayuda a ser más positivos en el presente”. Dijo en la presentación.
“Después de este viaje a Cuba no seré el mismo porque el individuo adquiere otras experiencias. Dentro de ti mismo existen muchas versiones de uno mismo. Esto se relaciona muy profundamente con la idea de ratificarse a uno mismo”, teorizó.
La búsqueda constante de la individualidad interior y los conflictos propios del ser humano resulta una constante en la obra del autor.
Hirano se encuentra en Cuba invitado por la Uneac y la embajada de Japón, en el marco de la XI edición de la Jornada por la Cultura Japonesa en Camagüey (Hanami) que se efectúa entre el 26 y 30 de abril.
En esta urbe el programa de hoy culminó con el panel Influencia de la cultura japonesa en la sociedad cubana actual, que contó con especialistas, escritores y periodistas de ambas naciones.
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