Según el sindicato, uno de los más grandes del país, 550 mil personas marcharon en esta capital, en la decimotercera jornada nacional de protestas en rechazo a la ya promulgada norma, que extiende la edad legal de retiro de 62 a 64 años.
La secretaria general de la CGT, Sophie Binet, consideró histórica la movilización y afirmó que la determinación sigue intacta.
De momento el Ministerio del Interior no ha publicado sus datos sobre los participantes, los que suelen diferir de manera significativa de los divulgados por los gremios.
Las multitudinarias manifestaciones mostraron el malestar con el Gobierno, y en particular con el presidente Emmanuel Macron, mediante el uso de pancartas, cantos y consignas, muchas de ellas demandando su renuncia.
En París, la emblemática estatua de la plaza de la República fue vestida de amarillo con el rótulo: “Macron dimisión”, en medio de los aplausos de centenares de personas presentes en el lugar, constató Prensa Latina.
Por primera vez en más de una década, los ocho principales sindicatos franceses marcharon juntos un 1 de mayo, con el reclamo unánime de la marcha atrás de la reforma de la jubilación.
El Gobierno prevé poner en vigor la norma a partir de septiembre.
Pese a los llamados a la movilización pacífica y a considerar la jornada de hoy una fiesta de los trabajadores, algunos individuos protagonizaron hechos violentos en esta capital y en ciudades como Nantes y Lyon.
Decenas de personas fueron arrestadas durante los disturbios, calificados por el ministro del Interior Gérald Darmanin de intentos de “asesinar a policías y de destruir las propiedades de otros”.
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