La Cámara Alta descartó por 24 votos a favor, 13 en contra, una abstención y siete ausentes la iniciativa promovida hace meses por sectores oficiales, parlamentarios y sociales que alegaron perjuicios a la soberanía por la presencia europea en el acuerdo de 38 millones de euros.
El Proyecto de Ley, cuya implementación algunos atribuyen ahora a campañas electorales asociadas a los comicios del 30 de abril, fue aprobado por la Cámara Baja en noviembre del año pasado y estaba a punto de recibir sanción ficta, pero ahora regresa a los Diputados.
Muchos senadores lamentaron las estrategias que consideraron manipulación y desinformación acerca del apoyo del organismo internacional y criticaron a otros legisladores “que utilizaron el documento como una bandera política”, afirma Últimas Noticias.
El discurso de algunos excandidatos a distintos cargos en los comicios “terminaron –según el diario- tergiversando la finalidad de la donación, que es destinada a infraestructura y almuerzo escolar”.
“Tratamos de derogar un tratado mediante una ley. Es algo que se llevó a cabo ya en el anterior gobierno”, expresó el senador Enrique Bacchetta, del triunfador Partido Colorado.
La parlamentaria por el mismo partido Blanca Ovelar recordó que propusieron tratar el proyecto después de las elecciones para analizarlo fríamente y sin el fragor de la lucha electoral, porque “clarísimamente este tema se tomó como una bandera electoral”.
Por su lado, el senador Hugo Richer argumentó la desigualdad social del país, “con muchísima pobreza extrema y problemas de educación, vinculada a grupos políticos que históricamente gobernaron, en dictadura y democracia, no invirtieron en educación y abandonaron a niñas, niños y jóvenes”.
La autoridad parlamentaria explicó la existencia en el país de 460 mil niñas, niños y adolescentes fuera del sistema educacional, cuyo destino “es responsabilidad de quienes tienen el poder político y económico”.
El bloque europeo declaró varias veces durante el pasado 2022 su “creciente preocupación” sobre la posibilidad de que Paraguay anulara el convenio.
La UE “no financia el proyecto de Transformación Educativa, ni decide el contenido de la malla curricular del sistema público educativo”, expresó el organismo en un comunicado suscrito el 13 de diciembre por su Delegación en esta capital.
Los fondos que el bloque destina al sector educativo paraguayo –aclara el texto- “son no reembolsables y no condicionados” y «no incluyen la ideología de género”
“Lamentamos el menoscabo que una derogación unilateral del Convenio Financiero ocasionaría en las relaciones entre la UE y Paraguay, que llevan 30 años de amistad y cooperación continuada”, afirmó el documento del ente comunitario. rgh/apb