Al menos 104 fueron rescatados, pero se teme que se incremente el número de muertes, pues los sobrevivientes indicaron que el barco transportaba hasta 700 migrantes, en su mayoría de Pakistán, Egipto y Siria.
De acuerdo con la fuente, algunas de las víctimas dijeron que entre los pasajeros había muchas mujeres y niños, mientras la Guardia Costera griega señaló que es difícil determinar exactamente cuántas personas había a bordo.
Las autoridades griegas investigan a tres sobrevivientes bajo sospecha de ser traficantes de personas, quienes llamaron la atención con su actitud relajada luego de ser rescatados y llevados a la ciudad de Kalamata.
Todos los auxiliados serán entrevistados como parte de una investigación preliminar para esclarecer las causas de la tragedia, refirió ERT.
La presidenta griega, Katerina Sakellaropoulou, visitó la zona donde se congregan los migrantes rescatados.
En reacción a la tragedia, el ex primer ministro y líder del Partido Nueva Democracia, Kyriakos Mitsotakis, expresó que el incidente destaca el hecho de que el tema de la migración es un problema necesitado de una política europea cohesiva.
A su vez, el líder del principal partido opositor Syriza, Alexis Tsipras, afirmó que el momento exige que el país dé prioridad a la humanidad y apoye a los sobrevivientes del naufragio, mientras se intensifican los esfuerzos para localizar a los desaparecidos.
La oficina del primer ministro interino Ioannis Sarmas anunció un período de luto nacional de tres días por las víctimas del naufragio.
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