O’Keeffe (1887-1986) fue conocida, sobre todo, por sus pinturas de flores y paisajes de Nuevo México, y en esta producción el público apreciará el uso del carboncillo, la acuarela y el grafito, materiales orgánicos con los cuales la artista exploró desde ritmos abstractos, hasta ciclos de la naturaleza, informó el MoMA.
«Georgia O’Keeffe: Ver requiere tiempo» revela una faceta menos conocida de la artista y coloca en primer plano su proceso persistentemente moderno sobre el papel, agregó la fuente.
Más de 120 obras creadas a lo largo de cuatro décadas demuestran el modo en que la creadora desarrolló, repitió y cambió motivos para difuminar la frontera entre la observación y la abstracción, apreció la prestigiosa galería.
En su conjunto, estas obras manifiestan cómo el dibujo en serie le permitió a la pintora, quien falleció a los 98 años, reelaborar los temas a lo largo de su carrera y revelar las elecciones del material, detrás de sus composiciones, valoró otra fuente, el sitio theartwolf.com.
En los años de formación de 1915 a 1918, O’Keeffe trabajó sobre papel más que en cualquier otro momento de su actividad creativa y produjo su innovadora serie de carboncillos y secuencias en acuarela de líneas abstractas, paisajes orgánicos y desnudos, reseñó el MoMA.
Aunque su práctica se orientó cada vez más hacia el lienzo después de ese periodo, volvieron a aparecer importantes series sobre pergamino, como las flores de la década de 1930, los retratos de 1940 y las vistas aéreas de 1950, todas, incluidas en la presente exposición.
«Las obras de O’Keeffe sobre el mismo material son la expresión perfecta de su creencia de que ver requiere tiempo», explicó la comisaria asociada al museo Samantha Friedman.
rgh/dpm