Se trata de Bassem Awadallah, exjefe de la corte real, y Sharif Hassan bin Zaid, exrepresentante jordano ante Riad.
‘La investigación está completa y el expediente está en manos de la Fiscalía General’, acotó una fuente oficial, citada sin identificar por la agencia oficial de noticias Petra.
Medios jordanos consideran a Awadallah cercano al príncipe heredero saudita, Mohamed bin Salman.
Las autoridades de reino hachemita arrestaron el 3 de abril pasado a 18 presuntos participantes en una conspiración que intentaba desestabilizar el país.
Arabia Saudita rechazó cualquier involucramiento en el presunto complot y expresó su pleno apoyo a Ammán y a las decisiones y medidas adoptadas por el rey jordano, Abdala II.
Al momento de producirse la conspiración, se dijo que uno de los sospechosos era el príncipe Hamzah, medio hermano del monarca, a quien Abdala marginó de la condición de heredero del reino en favor de su hijo Hussein.
Poco antes de su detención, Hamzah envió a la BBC un video, en el cual acusó a los gobernantes de ineptos y corruptos, pero las autoridades explicaron que su caso encontró solución en el seno familiar.
En declaraciones a la televisión, el jurista Laith Nasrawin apuntó que el proceso correrá a cargo del Tribunal de Seguridad del Estado y los cargos contendrán imputaciones por atentado al régimen político y a la seguridad social.
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