La mayoría de los parámetros que se monitorean en Mayon ahora son de bajo nivel, pero esto no significa que su estado pueda reducirse del nivel tres al dos (aumento de la agitación) en el corto plazo, explicó en conferencia de prensa el jefe de Phivolcs, Teresito Bacolcol.
El especialista señaló que solo se registró un terremoto volcánico en el cráter durante el período de observación de 24 horas, pero subrayó que incluso si los sismos aumentaran en número pero fueran débiles en magnitud, eso significaría que el nivel de alerta se mantendría en el tres.
Phivolcs divulgó que los flujos de lava han avanzado a longitudes aproximadas de dos mil 100 metros a mil 1300 metros a lo largo de los barrancos de Mi-isi y Bonga, respectivamente, desde el cráter de la cumbre; además, los escombros del derrumbe se han depositado a una distancia de tres mil 300 metros.
La entidad orientó que el público debe abstenerse de ingresar a la zona de peligro permanente (PDZ) de seis kilómetros de radio, incluso si el volcán está en Alerta Nivel 0.
En caso de que haya cambios repentinos en los parámetros o si es necesario elevar el nivel de alerta del volcán, se extendería la PDZ a un radio de siete kilómetros, aseguró Bacolcol.
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