El mandatario, quien recibió la presidencia pro témpore del organismo de su colega local, Alberto Fernández, precisó en la reunión en el nororiental Puerto Iguazú que perfeccionará ese mecanismo durante su gestión para que sea “una moneda regional de referencia específica para el comercio regional”, señala Página/12.
Lula, quien aclaró que dicho medio financiero “no afectará las monedas nacionales”, coincidió con el ministro argentino de Economía, Sergio Massa, que llamó a avanzar en el uso de monedas locales en el comercio, durante un encuentro la víspera con homólogos y titulares de bancos centrales del ente.
«El uso de monedas locales –abundó el titular local y candidato a la Presidencia- nos evita ser rehenes de los shocks externos y nos da mayor capacidad de desarrollo económico, mucho más cuando los temas de seguridad alimentaria y energética son parte de la agenda global de los próximos diez años».
Massa recordó al respecto que esta región y este bloque tienen un papel central para jugar en la producción de proteínas y en el abastecimiento energético.
Por su lado, la secretaria de Asuntos Internacionales del Ministerio de Hacienda de Brasil, Tatiana Rosito, aseguró que los miembros del Mercosur «buscarán potenciar el uso de las monedas locales en el comercio bilateral entre países del bloque».
Lula da Silva prometió, además, “concluir un acuerdo con la Unión Europea, otro de los objetivos vitales de esta Cumbre, “el cual –subrayó- debe ser equilibrado”.
“No tenemos intereses de firmar ningún documento que nos condene al eterno papel de exportadores de materias primas”, aclaró, afirmación en la que fue precedido por el gobernante argentino en su discurso inaugural.
Fernández llamó a “preservar los intereses” de la región y a reimpulsar un acuerdo “equilibrado” con la Unión Europea, que revierta el pacto “desigual” impulsado por el gobierno de Mauricio Macri.
“Para Argentina, el Mercosur es su plataforma de salida al mundo, su principal instrumento de inserción internacional”, recalcó el mandatario argentino, citado por Página/12).
Esta 62 Cumbre es la primera realizada de modo presencial en los últimos cuatro años, luego de la de 2019, tras la que los demás encuentros fueron celebrados por videoconferencia, a causa de la pandemia de Covid-19.
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